¿Qué pasa con mi Seguro Social si me deportan?
Escrito por Demian Kaltman - 26 de julio de 2022
En los años del gobierno de Donald Trump hubo una serie de modificaciones a distintas leyes y reglamentaciones en relación a la inmigración. Como consecuencia de esto, algunas prestaciones que eran otorgadas a extranjeros residentes fueron limitadas, especialmente en los casos de personas deportadas. La cuestión central de esta iniciativa es que también se alteraron algunas de las normas que enmarcaban la salida involuntaria del país.
Por esto, al interrogante de «¿Qué pasa con mi Seguro Social si me deportan?», debemos acudir a una enmienda a la Ley de Privacidad de 1974 que fue publicada el 16 de diciembre de 2019. En este marco se detallan las situaciones que deben afrontar cada uno de los extranjeros que deciden salir de los Estados Unidos, voluntaria o involuntariamente, en relación a sus derechos como inmigrante. Y en particular, lo que ocurre con ellos respecto al fondo del Seguro Social.
En esta enmienda se hace una diferenciación específica entre los ciudadanos y residentes, y se pone especial énfasis en la trazabilidad de los datos para perjudicar a aquellos que cruzan la frontera. Por esto es fundamental conocer los derechos de cada uno y la forma en que podemos defender aquellos beneficios adquiridos de acuerdo a la forma en que salgamos del país y el período en que cada persona se mantenga en el exterior.
En este artículo describiremos las situaciones que deben afrontar las personas que son deportadas, enfocados en la diferencia entre las distintas maneras en que se puede abandonar el territorio estadounidense. Si es posible rescatar el dinero del Seguro Social y si podemos nombrar algún representante que cobre de este fondo. De la misma manera, detallaremos los plazos que se deben cumplir para recuperar la tarjeta de la SSA luego de la deportación, si fuera posible.
¿Qué pasa con el Seguro Social de una persona deportada?
Antes de introducirnos en qué pasa con mi Seguro Social si me deportan, es importante conocer las distintas formas de salir del país. Y cuándo estas se corresponden con una deportación. Porque en este caso, los derechos adquiridos por extranjeros y residentes son completamente disímiles y puedan dar lugar a confusión. La salida involuntaria del país se materializa por razones específicas y se corresponde con la acción de deportar en los Estados Unidos.
Hay 4 razones fundamentales que pueden provocar una deportación, de acuerdo al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE):
- Ingreso ilegal al país.
- Cometer un delito o violación de las leyes federales.
- Desobediencia repetida a las leyes de inmigración (violación de permisos o condiciones establecidas).
- Involucramiento en actos criminales o amenaza para la seguridad pública.
Esto puede generar algunas dudas, ya que efectivamente hay una gran población latinoamericana que ha ingresado de manera ilegal al territorio estadounidense. En este sentido, cabe aclarar que en los casos que se detecten irregularidades se suele promover una salida voluntaria del país que no recibe el mismo tratamiento que las personas deportadas. Y también es importante indicar que los derechos adquiridos suelen ser muy difíciles de remover.
Es decir, que aquellas personas que ya tengan una situación migratoria regular, con los papeles al día, en principio no tendrían por qué preocuparse. En la administración actual se busca retroceder en algunas medidas más extremas que han perjudicado a los inmigrantes en general. Y si prima una buena conducta ciudadana, no deberían existir inconvenientes para la permanencia en el país. Incluso hoy es más sencillo acceder a algunos derechos y beneficios del Estado, como puede ser el Seguro Social.
En este sentido es relevante saber que las personas deportadas de los Estados Unidos no podrán mantener la cobertura del fondo del Seguro Social. De acuerdo a la enmienda del 16 de Diciembre del 2019 a la Ley de Privacidad de 1974, desarrollada por la Agencia de la Seguridad Social (SSA), se describe la trazabilidad de los datos entre las distintos servicios del Gobierno Federal para evitar que una persona que salga involuntariamente del país, pueda continuar percibiendo sus beneficios como residente.
En esta enmienda, se destaca una base de datos integrada entre el ICE y la SSA para suprimir los cobros de las personas deportadas. En el mismo documento, se identifica otra modificación realizada a la Ley de Protección del Seguro Social del 2004. Que fue realizada en el período trumpista y que detalla las circunstancias en donde se discontinúan los beneficios del fondo del Seguro Social para los casos en que la salida del país sea involuntaria.
También, en la misma enmienda, se destaca que aquellos residentes que salgan de los Estados Unidos sin tener en cuenta los procedimientos de inmigración, mantendrán sus derechos por un período de 30 días. Luego de este plazo, será necesaria una estadía de igual cantidad de jornales para volver a percibir los beneficios del fondo del Seguro Social. Para realizar consultas por este tipo de situaciones, es conveniente comunicarse telefónicamente con la SSA (800-772-1213) para despejar cualquier duda.
¿Puedo sacar la plata de mi Seguro Social antes de ser deportado?
Al igual que con el gran interrogante sobre qué pasa con mi Seguro Social si me deportan, es necesario saber que esto no será posible. El dinero del fondo del Seguro Social no se puede extraer en caso de ser deportado. En estas circunstancias, únicamente es posible retirar los montos disponibles en las cuentas bancarias por medio de un representante legal o familiar directo con acceso. La urgencia para estos casos, responde a la probabilidad de bloqueo o embargo de los activos.
La mayoría de los abogados que se dedican a temas de inmigración, plantean que hoy es casi imposible cobrar o recuperar un solo dólar luego de la salida del país. En general manifiestan que actualmente las deportaciones están abocadas en mayor grado a riesgos de la seguridad nacional o terrorismo. Y que aquellos que ingresaron ilegalmente en el territorio de los Estados Unidos son apercibidos para abandonar el país en el menor tiempo posible. La deportación en estos casos queda sujeto al incumplimiento reiterado de estos avisos.
También plantean que de acuerdo a los tratados internacionales es innegable el derecho de los trabajadores, independientemente de su estatus migratorio, a acceder a la riqueza que hayan generado y a los derechos adquiridos. Pero manifiestan que desde la promulgación de las enmiendas mencionadas, se impide la posibilidad de cualquier planteo judicial. Incluso se menciona un caso que llegó a la corte suprema y que en su dictamen estableció que los trabajadores ilegales no tienen derecho a recibir ningún beneficio.
Hasta que la enmienda cobró carácter legal, la SSA evaluaba las presentaciones de todos los extranjeros respecto a sus ingresos al fondo del Seguro Social y las limitaciones de los beneficios. La agencia solicitaba ciertas pruebas para realizar un análisis y tomar una decisión. Pero actualmente este procedimiento se encuentra completamente descartado y las personas deportadas no pueden acceder a ningún pago, ya sean compensaciones o beneficios por incapacidad o invalidez.
¿Puede alguien más cobrar mi Seguro Social?
Generalmente, no es posible que alguien más cobre mi Seguro Social. Este cuestionamiento es un tanto más complejo que el inicial (qué pasa con mi Seguro Social si me deportan), ya que depende en gran medida de la conformación de cada familia y la situación particular de sus integrantes. Si hay miembros de la familia que conservan su estadía en el país y hay hijos menores de edad, es conveniente realizar la consulta correspondiente en la Agencia.
La mayoría de los beneficios del fondo del Seguro Social son personales. Por tanto si el beneficiario es deportado ya no recibirá ningún pago ni puede hacerlo otra persona de su familia. Pero pueden existir casos particulares, donde haya menores que tengan alguna discapacidad o situación médica particular y por tanto reciban un beneficio del Seguro Social. En estos casos especiales, es posible verificar si se mantiene la circunstancia relatada en los apartados anteriores.
Más allá de la extrañeza de la situación y de que miembros de una familia se queden en el país si uno de sus integrantes fue deportado, se debe considerar que no es posible nombrar a un representante para el cobro de los beneficios. De acuerdo a la regulación vigente, las personas deportadas pierden todo tipo de derechos sociales en forma permanente. O al menos hasta recuperar el estatus migratorio, siempre y cuando esto sea posible.
¿Puedo volver a tener el mismo Seguro Social luego de ser deportado?
A partir de la deportación no es posible recuperar el número de Seguro Social. Este beneficio está únicamente dirigido a residentes legales y ciudadanos de los Estados Unidos. Además se deben considerar los impedimentos para volver a ingresar al país, que se mantienen por un período de tiempo prolongado y esto solo puede ser flexibilizado por cuestiones muy puntuales. La deportación es prácticamente una condena que restringe por muchos años el contacto con el gigante norteamericano.
Las condiciones para volver a ingresar al país luego de ser deportado son:
- Un extranjero deportado no podrá volver a ingresar al país por un período de hasta 10 años.
- En casos de delitos graves, la prohibición puede ser permanente.
- La deportación puede ser aplazada por asilo, perdón, violencia doméstica o ajuste de estatus.
- Se puede solicitar un perdón desde el exterior para disminuir el tiempo de castigo.
En este sentido, es importante valorar el motivo por el cual cada persona fue deportada. Porque no es igual el tratamiento de cuestiones migratorias que la comprobación de delitos graves. Y a su vez, es sustancial considerar, previo a la deportación, el asesoramiento de un abogado especialista, ya que hay varias circunstancias que pueden evitar que se haga efectiva. De la misma manera, también se debe valorar la diferencia entre la salida voluntaria del país, con el castigo promulgado hacia personas deportadas.
Aquellos que mantengan un estatus migratorio irregular o hayan ingresado al país en forma ilegal, pueden ser invitados a abandonarlo de manera voluntaria. En estos casos, siempre es conveniente aceptar el aviso y accionar en consecuencia, ya que dicha resistencia es la que puede generar un proceso de deportación. Las personas que abandonen el país de manera voluntaria, pueden volver a solicitar en forma inmediata una residencia laboral desde su país de origen. También pueden realizar visitas como turista.
Tanto las personas deportadas como aquellas que hayan abandonado el país en forma voluntaria, podrán recuperar sus derechos y beneficios al momento de resolver su estatus migratorio. En los casos de deportación, se deberá evaluar el castigo dictado y si se consigue un perdón. Si esto es posible, se podrá solicitar la residencia por distintos motivos y recuperar sus ingresos del fondo del Seguro Social. Solo en estos casos puede existir posibilidades de volver a tener el mismo SSN.
En la mayoría de estas circunstancias, quien atraviese un proceso de deportación, no podrá retornar al país por muchos años. Por lo tanto, es ciertamente improbable que recupere el número original de la seguridad social. Sin perjuicio de ello, es válido en los casos que se presuma alguna irregularidad que envuelva el exilio involuntario, realizar las presentaciones judiciales correspondientes por medio de letrados que tengan especialización en temas migratorios.