¿Cómo llenar un recibo de renta?: el ABC para hacerlo en USA

Muchas personas no solo se preguntan cómo llenar un recibo de renta al recibir uno de estos en USA, sino también cuál es su importancia en las finanzas. Y nosotros no somos la excepción. Por ello hemos investigado todo sobre el tema, y estamos emocionados de compartirlo contigo, a continuación.

Comencemos por destacar que un recibo de renta es un documento que avala el cumplimiento de las obligaciones de las partes involucradas en alguna transacción.
Por lo tanto, si eres propietario de algún inmueble y has decidido arrendarlo, necesitarás un recibo de renta de casa para dejar asentados los pagos de cada mensualidad.
De igual manera, si eres una persona que está buscando alquilar una propiedad, deberías saber la importancia de cómo se llena un recibo de pago.
En pocas palabras, en ambos casos se debe saber los deberes y derechos de cada posición. El inquilino tiene todo el derecho de pedir una copia del recibo de arrendamiento y el arrendatario está en todo el deber de otorgarle la copia, esto dejará claro que ambas partes han efectuado un acto de mutuo acuerdo.

¿Cómo se llena un recibo de renta?

Saber cómo llenar un recibo de renta implica saber que este tipo de recibo es muy variado, pues no existe ninguna cuestión impositiva al respecto.
Sin embargo, un acuerdo de renta tiene algunos elementos que invariablemente deberán aparecer en él. Por ejemplo, podrías agregar elementos a la estructura general, dependiendo de tus necesidades particulares. Sin embargo, los aspectos fundamentales para un recibo de renta son:

• Fecha del día de pago.
• Folio del recibo.
• Nombre del arrendatario, o la persona que está pagando por la renta de un inmueble.
• La cantidad pagada escrita con números y en la moneda en la que se paga la renta.
• Escribir con letra la cantidad que es pagada. Es necesario que también figuren la palabra y el distintivo de la moneda.
• En el concepto de la renta habrá que escribir el domicilio del inmueble que es arrendado.
• Establecer el periodo que está siendo pagado para tener derecho a la ocupación del inmueble.
• En la sección de pagos puedes agregar aspectos extra si te son necesarios, por ejemplo: mantenimiento, servicios, u otros.
• También es importante dejar claro cuál es el medio de pago: efectivo, transferencia bancaria o cheque.
• Por último, deben figurar el nombre y la firma del arrendatario o dueño del inmueble.

¿Qué debo tener en cuenta al momento de llenarlo?

Al momento de aprender cómo llenar un recibo de renta, debes tener en cuenta que cada estado puede tener exigencias propias respecto a estos acuerdos, ya que cada uno cuenta con sus propios niveles de independencia, pero generalmente, la base es la misma.
Por lo tanto, se debe revisar que cada aspecto fundamental del recibo de arrendamiento esté debidamente rellenado y que el inquilino y arrendatario estén conformes con lo que allí está expreso. Igualmente, las firmas de ambas partes significarán que ambas partes están conformes con el acuerdo de renta.
Otro aspecto sobre cómo llenar un recibo de renta que no podemos dejar pasar por alto, es entender cuáles son los derechos legales, por ejemplo, los límites estatales de los depósitos de seguridad.
Concretamente, las siguientes disposiciones suelen crear problemas para los inquilinos y deben ser eliminadas o renegociadas si es posible:

• Limite la responsabilidad del arrendador de proveer vivienda habitable. Como regla general, los propietarios están legalmente obligados a proporcionar una vivienda habitable y que cumpla con los códigos de salud y seguridad.
• Si compartes un medidor de utilidad, puedes solicitarle al propietario que instale uno separado para, por ejemplo, un calentador de agua, que servirá para varios apartamentos.
• Aumentos automáticos de alquiler. Es importante que evites las cláusulas que le otorgan al propietario el derecho de elevar automáticamente su alquiler para sufragar un aumento en los impuestos de propiedad, seguros, servicios públicos, o cualquier otro costo de operación de la propiedad.
• Acceso irrestricto por el arrendador. Las leyes en muchos estados protegen la privacidad del inquilino y limitan el acceso del propietario.
• Mantener cláusulas inofensivas.
• Los daños que sufras como resultado de la negligencia del arrendador o de la falta de mantenimiento de la propiedad.

Por otro lado, el No pago de la Renta tiene explicaciones detalladas en la Sección 83.56.3, F.S.
El propietario debe entregar al inquilino un aviso por escrito de tres días, excluyendo fines de semana y días feriados, para el pago de la renta o desalojo de la vivienda.
Si el inquilino no paga la renta o desaloja, el dueño puede tomar acción legal para comenzar un proceso de desalojo.
Para que el propietario pueda obtener el pago de la renta o la posesión de la vivienda, debe presentar una demanda en la corte del respectivo estado. De esta manera, el secretario de la corte podrá enviar la notificación de la citación al arrendatario y al inquilino.
También es importante destacar que este debe cumplir con los requisitos señalados en la convocatoria dentro del plazo citado.
Una vez teniendo revisados estos puntos generales, se puede observar que las obligaciones, tanto para el propietario, como para el inquilino, están reguladas y definidas.
Además, existe un ente legal que normaliza la relación entre ambas partes y busca una convivencia armónica en la que el desarrollo de la relación comercial sea sana y de mutuo beneficio. Por lo que se podría decir que invertir en un inmueble para percibir renta es una buena y segura opción si buscas incrementar tus finanzas.
En este recibo de arrendamiento se pueden especificar los conceptos que son cubiertos con el pago de la renta. Por ejemplo: las cuotas de administración y mantenimiento. También, en el caso de los condominios, se podrían incluir servicios como agua, luz, gas, teléfono, internet; así como otro tipo de gastos que pudieran generarse.
Usualmente, las personas guardan una copia simple de los recibos que entregan o llevan un registro de estos, por lo que también es posible enumerar los recibos para llevar un seguimiento preciso de los pagos.
Para que el recibo sea válido, únicamente se requiere que el arrendador o propietario lo firme de manera autógrafa al final del documento.
Una vez realizado este documento, el recibo de arrendamiento se entrega al inquilino, una vez este allá efectuado los pagos que le corresponde entregar al propietario de la vivienda o arrendador. Esto puede hacerse de manera personal, a través de mensajería o por correo tradicional.
Por otro lado, si el recibo se va a entregar de manera electrónica, e-mail, fax, a través de una red social, o mensaje multimedia, deberá primero imprimirse y firmarse de manera autógrafa, y posteriormente digitalizarse a través de un escáner o fotografía.

¿Qué costo tiene el recibo de renta para el inquilino?

Es importante señalar que la entrega del recibo no debe generar ningún costo adicional para los inquilinos. Además, el propietario de una vivienda que no sea una vivienda unifamiliar o dúplex deberá, en todo momento durante el arrendamiento, hacer provisiones razonables para:

1. Exterminación de ratas, ratones, hormigas, organismos destructores de la madera, y chinches.
2. Cerraduras y llaves.
3. Condiciones limpias y seguras de áreas comunes.
4. Eliminación de basura y los recipientes exteriores.
5. Funcionamiento de las instalaciones de calefacción durante el invierno, agua corriente, y agua caliente.
6. Un dispositivo de detección de humos en funcionamiento si la vivienda es una vivienda unifamiliar o dúplex.

Asimismo, el inquilino en todo momento, durante el contrato de alquiler, deberá:

• Cumplir con todos los códigos de construcción, vivienda y salud.
• Mantener la vivienda limpia y sanitaria.
• Retirar la basura de la vivienda de manera limpia y sanitaria.
• Mantener los accesorios de plomería limpios, sanitarios y en reparación.
• Utilizar y operar de manera razonable todas las instalaciones eléctricas, de plomería, sanitarias, de calefacción, de ventilación, de aire acondicionado y otros aparatos y artefactos, incluyendo los elevadores.
• No destruir, alterar, dañar, perjudicar o eliminar cualquier parte de las instalaciones o los bienes pertenecientes al propietario, ni permitir a cualquier persona a hacerlo.
• Comportarse y requerir de otras personas dentro de la unidad, que se comporten en una manera que no perturben innecesariamente a los vecinos o que constituyan una violación de la paz.

¿Debo pagar impuestos por la renta?

Pagar impuestos por la renta es la pregunta más frecuente que realizan los inquilinos a la hora de buscar arriendo. Y para responderla, lo primero que debemos considerar es que es importante que tanto arrendadores como arrendatarios se mantengan al corriente de sus obligaciones fiscales, con el fin de evitar problemas con la autoridad fiscal.
En el caso de los inquilinos, solamente tendrán que hacer deducible el pago de la renta que viene en el Comprobante Fiscal Digital por Internet, que el propietario le entrega de manera mensual.
Si viven varios inquilinos, podría darles un comprobante fiscal digital por internet a cada uno de los habitantes, siempre y cuando el dueño lo autorice.
En el caso de una renta en donde vivan cuatro personas, se le tendría que entregar a cada inquilino un comprobante fiscal digital por internet, con la cantidad dividida que les corresponda, para que al juntarlos, sume la cantidad exacta del total del recibo de renta de casa.

En este tipo de casos, lo mejor es que los inquilinos lleguen a un acuerdo para ver quién va a facturar y quien solamente tendrá un comprobante fiscal.
Si posees un bien inmueble en los Estados Unidos o estás en planes de compra, es importante que conozcas uno de los compromisos legales que debes atender periódicamente: el pago de impuesto sobre la propiedad, property tax, en inglés.
El impuesto sobre la propiedad en los Estados Unidos es la contribución económica que los ciudadanos realizan a sus localidades, condados o estados, basada en el valor justo que una propiedad tiene en el mercado.
Su propósito es financiar la infraestructura y los servicios públicos como:

• Vialidad.
• Escuelas.
• Servicios de policía y bomberos.
• Alcantarillado, entre otros, en su jurisdicción.

Además, cada uno de los estados tiene su propia legislación dónde establece las normas, características y condiciones en la que tanto los impuestos sobre bienes inmuebles como los impuestos sobre la propiedad personal deben gravarse y las autoridades responsables de su recolección.
De hecho, una gran parte de los estados no exigen esta contribución a sus habitantes. Son las autoridades locales las que determinan estas medidas impositivas. A veces, ciudades, condados o distritos escolares coinciden en su aplicación.
Concretamente, todos los ciudadanos norteamericanos o residentes permanentes que sean dueños de propiedades inmuebles, de tipo residencial y comercial. O de bienes muebles gravables cuando corresponda, están obligados a pagar el referido impuesto dentro de los términos establecidos por la ley.
Tampoco puedes olvidar que, como propietarios, también se les permite declarar un valor estimado sujeto a revisión, y tienen la posibilidad de gestionar exenciones, compensaciones o subsanación del impuesto cuando califiquen, según sea el caso.
Las exenciones, parciales o totales, pueden referirse a:

• Uso de vivienda principal.
• Veteranos de guerra.
• Zonas industriales.
• Organizaciones sin fines de lucro.
• personas mayores de 65 años, discapacitadas o sobrevivientes.

El impuesto sobre la propiedad se cancela de forma anual, y normalmente corresponde al mes de noviembre o el último trimestre del año en curso. Cada jurisdicción establece el calendario para que los contribuyentes participen en las diferentes fases del proceso.
En diversos estados, puede considerarse un proceso extendido a dos años, debido a que la valoración del inmueble y la obtención de beneficios abarcan hasta fines del primer año. En tanto, la cobranza, previo a las multas y penalidades, ocupa los primeros meses del año siguiente.
Las tarifas de pago son variables. Al tratarse de impuestos locales y estatales, pueden oscilar entre el 0,25% y el 4% del valor total de la vivienda, sea casa o departamento o una porción determinada del bien inmueble.
Finalmente, el pago se puede realizar en efectivo, cheque, depósito o transferencia. La no cancelación del impuesto sobre la propiedad en el tiempo previsto puede ocasionarnos la incautación y remate del inmueble en cuestión por la autoridad fiscal.